La industria cementera y sus actividades relacionadas cerraron un muy buen 2017. El año pasado, el despacho de cemento superó en 11,4% lo consumido en 2016.
Si bien en Diciembre se advierte una baja en relación al mes de Noviembre y eso es lo habitual cada año, el freno en la obra pública explica la caída intermensual. Como los motivos de la merma sería la búsqueda de los municipios, las provincias y el Gobierno nacional por achicar el déficit público al final del 2017, los números serían alentadores.
Al buscar las causas de este firme crecimiento en la demanda es imprescindible escuchar lo informado por grandes empresas que comunicaron millonarias inversiones en el sector.
Asi las cosas, Holcim anunció el mes pasado al presidente Mauricio Macri una inversión de u$s 120 millones en su planta de Malagueño, Córdoba, para aumentar en 45% su capacidad de producción. Algunos afirman que desean prevenir una escasez en los próximos años. «Estamos viendo que la economía argentina, y en particular de la construcción, tiene perspectivas de crecer de manera sostenible, especialmente en viviendas e infraestructura. Hacia 2020 podemos entrar en un problema de escasez de volumen de cemento para lo que podría demandar el mercado y estas inversiones hay que planificarlas con tiempo, porque no se dan de un día para el otro. Esperamos para finales de 2019 estar listos para satisfacer esa demanda», explicó Carlos Espina, CEO de Holcim Argentina, a El Cronista quien presentó hace un mes el proyecto al presidente.
Analizando el mercado de cemento nacional todas las principales compañías están invirtiendo fuertemente, por lo que la apuesta no responde sólo a una estrategia de Holcim particular sino a un futuro prometedor de todo el sector que es muy competitivo. Para contextualizar lo descripto: «El grupo Holcim es un grupo internacional con presencia en más de 80 países y ahora mismo, en América latina, la inversión en la Argentina es la más importante en estos dos años», destacó Espina.
Y esto tendrá cierto impacto en lo laboral. El proyecto de expansión de la planta Malagueño generará una capacidad adicional de 730.000 toneladas anuales y tiene un plazo de dos años: las obras comenzarán en el primer semestre 2018 y la puesta en producción a fines de 2019. Según informó la compañía, generará unos 300 empleos durante los años de construcción, con picos de hasta 600 personas. Y alrededor de 100 empleos directos e indirectos adicionales en planta, luego de la etapa de estabilización de la producción.
En relación a lo descripto, no podemos olvidarnos de mencionar que en 2017 hubo récord histórico de uso de asfalto vial en Argentina. El consumo alcanzó las 619.260 toneladas en 2017, el mejor año de la historia en despachos de este insumo utilizado exclusivamente en la obra pública, luego de 20 años, informó el Ministerio de Transporte.